En el año de 1966, bajo la iniciativa del padre, Fray Ernesto Espitía y con tan solo 36 personas que recorrieron el atrio y patio del Templo de la Cruz, se dio inicio, a la ya tradicional Procesión del Silencio como un acto de devoción y fe.
Esta tarde la Festividad religiosa No. 49 dio inicio con más 400 penitentes que se prepararon con retiros espirituales, platicas y misas.
Son 12 hermandades las que participan, la Procesión del Silencio, va presidida por una venerada imagen de Cristo, de María Santísima y de otras, para conmemorar la pasión de Cristo al cargar la cruz hasta el Calvario.
Este es un acto de penitencia en donde el cinturón, la Cruz y la cadena al tobillo dan fe del sufrimiento que paso Jesús antes de su muerte y resurrección.
Al respecto Lucely León López, Participante de la Hermandad de la Virgen de los Dolores, señaló que este es su cuarto año en la Procesión, esto en agradecimiento de los favores recibidos.
“Una por la Fe y dos porque Dios ne ha regalado muchas cosas maravillosas en mi persona, en mi familia y María Santísima por igual, y estoy por amor a ellos”.
Fueron cerca de 5 mil asistentes, los que disfrrutaron el recorrido de la Procesión del Silencio en distintas calles de la Capital del Estado.
