En Tolimán, el problema de la escasez de agua potable ha alcanzado proporciones alarmantes, afectando a aproximadamente el 80% de sus habitantes, según informó la alcaldesa María Guadalupe Alcántara de Santiago.
Con una población total de 29 mil personas, cerca de 17 mil a 18 mil tolimaneses se enfrentan diariamente a la falta de agua.
“No ha llovido, los bordos no se llenan y la situación es realmente difícil”, expresó la alcaldesa.
A pesar de los esfuerzos coordinados con la Comisión Estatal de Aguas (CEA) durante más de tres años, donde se invierten cerca de 3 millones de pesos anuales en el tandeo y suministro de pipas, la situación persiste.
“Contratamos más de 5 pipas de 20 mil litros cada dos o tres días para abastecer a las comunidades, pero incluso así, muchas áreas de difícil acceso siguen teniendo problemas”, señaló Alcántara de Santiago.
La escasez de agua se ha vuelto una necesidad urgente en la región, especialmente en zonas indígenas donde la demanda es más alta.
A pesar de la temporada de calor y el riesgo de incendios, hasta el momento no se han registrado emergencias.Sin embargo, las presas y bordos muestran signos preocupantes, con apenas un 40% de su capacidad.
“Todos nuestros bordos están a un 40%, lo cual es alarmante. Estamos haciendo todo lo posible para asegurar que nuestros residentes tengan acceso al agua, especialmente en áreas turísticas como San Pablo y Carrizalillo”, agregó la alcaldesa.
Esta situación resalta la urgencia de tomar medidas a largo plazo para garantizar un suministro sostenible de agua en Tolimán y otras áreas afectadas por la escasez.