Fue a través de un Amparo promovido que se logró el registro
Mariel Rangel y su esposo Miguel solicitaron al Registro Civil que su hija Luna tuviese los apellidos maternos de ambas partes.
Dicho trámite lo realizaron desde noviembre del 2020, mismo que fue rechazado por la dependencia antes mencionada, por lo que procedieron a contratar una abogada para defender su decisión por medio de un amparo.
“Es algo que mi esposo y yo discutimos en el embarazo, primero yo fui mamá soltera y mi esposo me dijo: “que era muy importante que se reconozca tu trabajo y el valor que tienes tú y por que no hacerlo mediante los apellidos, así como reconocer la labor de tu mamá y de mi mamá”, entonces es algo que motivo para la ley les otorgara los apellidos maternos de ambos”.
Luego de que el resultado fuese a favor de el matrimonio tras haber apelado la decisión a través del amparo, asistieron este miércoles al Registro Civil municipal de Querétaro para por fin obtener el documento de identidad de su hija, así mismo que esto sea una consideración para abrir la posibilidad para otras familias.
“Estoy muy contenta y vemos el impacto de nuestras acciones, esto va generar un precedente en un futuro, va a abrir otros canales para que mas familias, independientemente de cual se el núcleo van a poder hacerlo sin ningún tipo de restricción”, concluyo Mariel Rangel.
Por otra parte, la madre de Mariel, dijo que esta decisión es algo natural y que debería de ser un tema legal y espera que las autoridades permitan la libre elección a las parejas o a las madres y padres solteros.
“Esta fabuloso porque es elección de ambos, esto debió haber sido siempre así, pero que sea elección de cada quien y conjunto, ¿Por qué es a fuerza del paterno? no esta bien, porque hay muchos matrimonios o relaciones que no funcionan y a veces los papas no se vuelven a aparecer, en caso de las mamas solteras, que los niños nazcan libres y sin prejuicios”, declaró Alma Rangel, mama de Mariel.
Además la pareja considera realizar el cambio de apellidos para su hija mayor y repetir la misma decisión, para que sean los apellidos maternos los que aparezcan en su acta de nacimiento.