Un grupo de repartidores de rappi, Uber y Didi se manifestaron afuera unos departamentos de un fraccionamiento ubicado en colonia Galindas para exigir a una cliente que pagara productos que había solicitado, señalan qué el monto asciende a más de mil 800 pesos.
El repartidor afectado de nombre Mario aseguró que el pasado sábado una mujer que habita en la colonia Galindas, le solicitó botellas de vino y cigarros, pero la transferencia que presentó era falsa.
Por lo que varios repartidores se sumaron a una protesta para exigir que se realice el pago, ya que ellos son los que tienen que solventar la compra realizada.
“Lo que pasa es que venia a dejar un pedido y la muchacha me marco para decirme que haría una transferencia por que el pago era en efectivo y me mandó captura de una transferencia, no se vio reflejado” explicó el afectado.
A pesar de la manifestación, no tuvieron una respuesta favorable.