Las Facultades Unidas de la UAQ informó que no recibirá a la comisión de mediación que propuso la rectora, Teresa García Guasca.
En un video aseguraron que no tienen confianza en las autoridades universitarias debido a que no se han puesto en la mesa las renuncias que solicitaron el pasado 7 de octubre.
“El Comité de Redacción del Pliego Petitorio de Facultades Unidas aclara que por ahora no es posible recibirles, pues es esencial consultar con las, les y los integrantes de los diferentes Campus, Facultades y Escuela de Bachilleres. Recordemos que se trata de un movimiento que busca con todos sus esfuerzos basarse en la horizontalidad, por lo que toda decisión debe tomarse representando los intereses y la dignidad de las, les y los compañeros de la comunidad estudiantil”.
Reiteraron que el pliego petitorio expone las demanda y sentires de la comunidad estudiantil, que además ha sido socializado con las y los estudiantes, pero no ha sido externado en su totalidad a las autoridades universitarias para el inicio de las mesas de trabajo porque no se han considerado las renuncias que solicitaron.
Por lo tanto, volvieron a exigir las renunciad o destituciones de 4 docentes y administrativos a quienes llamaron “abusadores, negligentes y corruptos”.
Aseguraron que el “sacrificio” de mantenerse en el paro valdrá la pena para poner un alto a la violencia género y el acoso.
“A nuestras hermanas, hermanes y hermanos, decirles que, al igual que muchos de ustedes, nosotres también queremos regresar a nuestras aulas, sin embargo, tenemos que hacer que nuestro sacrificio valga la pena; que cuando regresemos a clases nos sintamos en un lugar más seguro y libre de violencia”.
Finalmente pidieron a la sociedad civil la comprensión y empatía, pues están cansados del poco accionar de las autoridades universitaria y afirmaron que las autoridades universitarias están apelando al cansancio de los paristas”, indicaron.
Expresaron estar conscientes que la violencia de género, diversidades y disidencias sexuales no es un problema exclusivo de la universidad, es algo que atraviesa a toda nuestra sociedad.
“Sin embargo, esto no significa que tengamos que seguirla tolerando en nuestra casa de estudios. No permitiremos que autoridades negligentes y agresoras sigan en nuestra universidad, ustedes autoridades están apelando a nuestro cansancio, a que este termine por derrumbarnos. Eso es criminal, porque saben que quienes estamos aquí, en el paro, estamos poniendo fuerza, cuerpo y vida, y deciden alargar el asunto, otra vez viéndonos sufrir”.
