En medio de crecientes tensiones en la esfera política, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha sido señalado por el senador Emilio Álvarez Icaza para lucrar con la polarización en torno a los libros de texto gratuitos proporcionados por la Secretaría de Educación Pública. Álvarez Icaza, miembro del Grupo Parlamentario Plural, lamentó que el mandatario utilice la polarización como una herramienta, en lugar de promover un ambiente de unidad y diálogo constructivo.
“Yo no puedo culpar al presidente de haber inventado la polarización, esa ya existía, lo que no le permito, no le acompaño es que lucre la polarización”.
El senador, durante su visita a Querétaro, expresó su preocupación por la manera en que los libros de texto se están convirtiendo en un campo de batalla política en el país. Álvarez Icaza subrayó que los niños y niñas, destinatarios finales de estos materiales educativos, no deben ser utilizados como instrumentos de conflicto, sino como espacios de encuentro y aprendizaje.
“Me parece muy delicado que los libros de texto sean otro anillo de polarización del país, eso no está bien, ojalá podamos encontrar un acuerdo para tener una expresión donde todos nos sintamos representados, los niños y niñas no pueden ser arena de conflicto, tienen que ser espacio de encuentro”.
Recordó que en 2019 se promulgó una nueva ley general de educación, impulsada por el partido Morena, la cual establecía un procedimiento de consultas para la creación de los libros de texto. Sin embargo, el senador señaló que ni siquiera el propio partido cumplió con dicha normativa, al no llevar a cabo las consultas previstas. Álvarez Icaza se enfatizó que si se hubiera seguido el proceso de consulta propuesto en 2019, se habrían generado discusiones enriquecedoras con especialistas, padres de familia y académicos, lo que habría contribuido a un enfoque más equilibrado y representativo en la educación.
La falta de cumplimiento de la ley propuesta y la ausencia de consultas pertinentes amenazan con llevar nuevamente la controversia a la Corte, planteando preocupaciones sobre la constitucionalidad del proceso. Álvarez Icaza concluyó que el desarrollo de la ley y la polarización política en torno a los libros de texto solo sirven para profundizar las divisiones en la sociedad, en lugar de promover la educación como un pilar de unidad y desarrollo.
En un momento en que la educación es clave para el futuro de México, la falta de consulta y el uso político de los materiales educativos generan interrogantes sobre el compromiso real de las autoridades con la calidad educativa y el bienestar de las nuevas generaciones.
