Las temperaturas elevadas en el estado de Querétaro se mantendrán hasta la primera semana de octubre, pudiendo alcanzar entre los 30 y 42 grados centígrados, por lo que la Secretaría de Salud del Estado de Querétaro (Seseq) recomienda a la ciudadanía no exponerse a temperaturas ambientales elevadas a fin de reducir riesgos y daños a la salud.
La dependencia puso en vigor el Programa de Vigilancia, Prevención y Control de Daños a la Salud por Temperaturas Extremas Naturales, el cual consta de dos fases: “Época de Frío y Heladas” y “Temporada de calor”, en esta última, el objetivo principal es prevenir los golpes de calor y sus complicaciones, que pueden ir desde quemaduras por exposición al sol, hasta enfermedades diarréicas agudas.
Por ello, la dependencia informó que las unidades médicas de la entidad cuentan con los insumos necesarios para atender a las personas afectadas, además que se brinda capacitación capacitación a responsables de menores de 5 años, referente al manejo de diarreas en el hogar y el uso correcto de los sobres Vida Suero Oral.
También, con el objetivo de evitar las diarreas por alimentos en mal estado, se realizan acciones de protección contra riesgos sanitarios como: verificación a establecimientos que elaboran y expenden alimentos preparados; verificación a plantas purificadoras de agua y productoras de hielo.
Señalaron que la participación social es imprescindible para evitar padecimientos en esta temporada, por lo que exhortan a la población queretana a que adopte las siguientes medidas preventivas:
- Evitar la exposición prolongada a los rayos del sol.
- Usar ropa ligera y de colores claros.
- Usar sombrero o sombrilla y manténgase en lugares frescos.
- Evitar la actividad física y ejercicio extremo al aire libre especialmente entre las 11:00 y las 15:00 hrs.
- Incrementar el consumo de líquidos y evite la ingesta de alcohol.
- Lavar las manos frecuentemente
En cuanto a los líquidos y alimentos, recomiendan tomar agua hervida, clorada o purificada; consumir inmediatamente los alimentos después de prepararlos y evitar su descomposición, consumir pescados o mariscos fritos o cocidos, no comer alimentos en la vía pública que se encuentren mal conservados o de dudosa procedencia y, lavar y desinfectar frutas y verduras.
En caso de padecer un golpe de calor o alguna afección por las altas temperaturas, recomiendan no automedicarse y solicitar atención médica en forma oportuna.