“Frecuencias”.
¿Estamos en Querétaro preparados para encarar la problemática de la contaminación ambiental?
De entrada, lo dudo.
Mi sustento está relacionado con la información y los respectivos datos que personalmente me proporcionó el titular de la dependencia estatal Sedesu (Secretaría de Desarrollo Sustentable), el ingeniero Marco del Prete Tercero, en el sentido de que únicamente cuentan con 9 estaciones que realizan el monitoreo de la calidad del aire y las contingencias ambientales.
Seis de ellas son fijas; cinco se encuentran en el municipio de Querétaro y la otra en el municipio de San Juan del Río, las tres restantes son estaciones móviles.
Con un registro reciente acerca de que el 75% de vehículos circulan en los municipios de Querétaro, El Marqués y de Corregidora. Sólo en el primero, circula el 64% de los vehículos automotores. En toda la entidad federativa el parque vehicular rebasa la cantidad de 600 mil vehículos, que circulan regularmente. Por otro lado, con la normatividad regulada de manera “fast track” por parte de la actual Legislatura Local, cuya mayoría son del Partido Acción Nacional (PAN), para que desde este año los vehículos se verifiquen de manera obligatoria un par de veces al año.
Nos preguntamos si los 50 Verificentros existentes en todo el estado serán suficientes para realizar las dos verificaciones anuales a cada uno de los 600 mil vehículos registrados. De esos Centros de Verificación, 33 se ubican en la capital, 5 en San Juan del Río; 3 en Corregidora; los 9 restantes están distribuidos en el resto de la entidad. La lógica indica que habrá necesidad de abrir nuevos y mayores espacios para efectuar dicho servicio; será un interesante negocio para todos los involucrados, -empresarios y dependencia gubernamental reguladora- en el entendido de que 60 pesos (por cada una de las verificaciones) irán a parar a las arcas financieras del estado de Querétaro.
Cabe mencionar también que la mayor cantidad de empresas e industrias se ubican en el territorio capitalino y en San Juan del Río, en razón de ello es que los problemas de contaminación y de la calidad del medio ambiente proliferan, sobre todo cuando no hay condiciones climáticas (ejemplo, por la acción de los vientos) que facilitan se concentren elementos químicos dañinos a la atmósfera y a la salud humana.
En cuanto a las mediciones de las partículas de ozono y de otros elementos químicos adicionales en la zona metropolitana de Querétaro, la Sedesu refiere que el ozono se presenta en la atmósfera baja por reacciones fotoquímicas, es un contaminante secundario y éste le afecta al ser humano, como resultado de las concentraciones entre 0.05 y 0.1 mg kg-1, ello causa irritación de ojos, garganta y de fosas nasales, así como por la presencia de resequedad en vías respiratorias. Relacionadas particularmente por la indiscriminada, imprudencial y lesiva quema de pastos secos -en muchas ocasiones premeditada- por parte de vándalos o de los mismos labriegos, que por ignorancia del efecto dañino que causan al medio ambiente y a las personas siguen creyendo en esa perversa práctica de quema de pastos, con el pretexto de que “están preparando el terreno para la nueva siembra”.
Ese problema se acrecienta, además en la época de estiaje con la presencia de fuertes y prolongadas tolvaneras, debido a los vientos que actúan sobre los terrenos erosionados o carentes de vegetación y que en muchos casos se relaciona también por las frecuentes obras de construcción y excesiva excavación de los cerros, donde se extrae material destinado a las edificaciones,un ejemplo son las arcillas, para acabarla de estropear, por las arenas que hacen de las suyas cuando se presentan vientos fuertes. El resultado: contaminación ambiental, aunado al pesado y recurrente tránsito vehicular que de sur a norte (y viceversa) circula por la zona metropolitana de la capital queretana, que se dirigen a diversas partes de la República Mexicana.
En todo ese cúmulo de situaciones, las autoridades del estado de Querétaro, llámese Secretaría de Desarrollo Sustentable y Economía (Sedesu) y la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas (SDUOP), así como de los municipios involucrados tendrán que ejecutar acciones de manera vinculadas, a fin de que se contribuya a un sano desarrollo de la región.
Nos resta mencionar que la Sedesu -no sólo deberá regular e inspeccionar- la buena observancia de la prestación del servicio público de verificaciones semestrales, sino además tendrá que identificar, monitorear y advertir con prontitud a la población acerca de los Índices Metropolitanos de la Calidad del Aire (IMECA) en cuanto a los niveles de contaminación atmosférica. De ahí que se refiera a los niveles de contaminantes y sus valores. Tal y como sucede en otras localidades de la República Mexicana, como la Ciudad de México, Guadalajara, Monterrey, entre otras.
A continuación se enlistan algunas medidas de tipo general que ayudan a mejorar la calidad del aire: 1) Mejoramiento del transporte público; 2) Mejor calidad del combustible; 3) Buen ordenamiento Urbano; 4) Modernización del parque vehicular, sobre todo del transporte público urbano de pasajeros y de carga los cuales transportan mercancías; 5) Verificación vehicular puntual y rigurosa; 6) Inspección aleatoria y permanente de las industrias, sobre todo de aquellas que registran algún tipo de contaminante; 7) Reforestación en las zonas críticas por donde circula la mayor parte del tránsito de vehículos, así como de las zonas geográficas que carecen de áreas verdes; 8) Pavimentación ( o repavimentación) de la carpeta asfáltica en horas de menor tráfico de vehículos; 9) Prevención y Control de la contaminación generada por establecimientos mercantiles -como de aquellos que expenden pollos asados al carbón y de servicios (mecánica automotriz), así como de las fuentes móviles; y, por supuesto, a través de la estricta medición y monitoreo de la calidad del aire.
@JROLDANA
