TRAS LA VERDAD
La unidad para sumar candidaturas requieres sacrificios; autoridad moral de quien la promueve; conocimiento del territorio político; buenos oficios y excelentes acuerdos que fortalezcan la unidad al interior. La simulación no prospera y genera el rompimiento que divide a los grupos al interior de los partidos políticos.
Los tiempos procesales se vinieron encima y con ello surgen nombres y nombres de aspirantes a candidaturas. El “chiquillerío” en busca de nombres, en tanto que los mayores con sus diferencias a flor de piel. La resolución del TEE les da la oportunidad a los panistas de recomponerse.
En el PRD, al menos mediáticamente, surgió la ruptura por la supuesta falta de inclusión de grupos en las candidaturas. Amenazan con una “fuga” masiva de militantes, aunque no se sabe de dónde saldrán más de los que son. Ahí está el resultado de una mala negociación en el juego de la unidad “virtual” que no se cristaliza en lo material.
En el PRI ahí van saliendo poco a poco los nombres. La primera muestra de escisión se da en El Marqués, siempre “broncos”. Falta tejer fino para “planchar la unidad” antes de que se repita una historia ya pasada que los lleva al fracaso electoral. Es poca la distancia para alcanzar el consenso. Seguramente a partir del fin de semana las cosas cambien con el candidato de unidad al gobierno del Estado que ponga orden.
Entretanto podemos entresacar nombres de aspirantes priistas al V Distrito Electoral Local, son muchos, unos recién llegados, otros no tanto; pero la aspiración los anima a buscar la candidatura. Zona populosa de la capital queretana, con cerca de 100 mil empadronados. Iniciemos por la cortesía de las damas. Alejandra González y Mariana Ortíz. Le siguen Eric Gudiño, Gaspar Trueba y Ricardo Azuela.
De entre los nombres sobresale el de Eric Gudiño, quien viene trabajando –a pesar de su juventud- con el equipo del gobernador desde la campaña al Senado de la República. Ha hecho un buen trabajo de acercamiento con la sociedad con sutileza y sin protagonismos; hace trabajo “pie-tierra” y así lo ubican en ese territorio. A diferencia del resto que si bien una aspirante ya no es tan joven, tiene una vida incipiente en el ámbito de la política, me refiero a González; identificada con el sector empresarial. Ortiz y Trueba son herencia de Tonatiuh y no quiero significar que ello sea malo, simplemente que su arribo a la política empieza, les falta madurar. Azuela, un joven con antecedentes priistas que habla bien de él, sus padres buen ejemplo de trabajo y honestidad, también va iniciando su carrera.
Del nutrido grupo de aspirantes priistas a este popular y populoso distrito, seguramente el PRI deberá enfocar su visión en la persona más rentable electoralmente, de experiencia político-electoral y sensibilidad. Aquellos que huelan a perfume caro no lograrán mucho. Los tiempos apremian, el aval deberá ser garantía de triunfo.
