TRAS LA VERDAD
Con soltura y sin disimulo Andrés Manuel López Obrador, ante la complacencia del INE, alegremente afirma que van a la cabeza en las encuestas para la Presidencia de la República, pero que no deben confiarse, dice a los militantes de Morena, asegurando que el año venidero volverá a recorrer toda la República Mexicana.
Hombre conocedor de las campañas electorales y necesidades que deben cubrir antes de las elecciones de junio de 2018; pide a los morenistas que tengan listos a los miles de representantes que actuarán en las casillas, la estructura electoral responsable de defender el voto y cuidar los votos.
Como es su costumbre afirma que habrá compra masiva del voto y para eso deben estar preparados. Les pide no “dormirse en sus laureles”, dado que el animal es muy grande. Con aquello de la rebelión en la granja de su publicidad política en los medios masivos de comunicación en la que hace un símil de los partidos de oposición, como si se tratase de animales, aunque se basa en una novela para denigrar y ofender a sus contrincantes por aquello de las acusaciones.
Sin embargo es clara la intención de ofender a sus opositores, comparándolos con animales: “puercos y cochinos”. Por desgracia en más de algún caso no le falta razón, como el caso de Veracruz sería el ejemplo más contundente. Vaya bestia que gobernó a ese hermoso estado.
Amlo adelanta que en abril del año próximo llevarán a cabo reunión con sus dirigentes de todos los estados, para continuar con su estrategia de campaña mediática y de afiliación ante la complacencia del INE; desgastar al PRI fundamentalmente. Ahora se da a desear, tratando de endulzarle el oído a Alejandra Barrales, para acordar una posible alianza electoral, siempre y cuando sea él quien encabece la candidatura a la Presidencia de la República, así como senadurías y diputaciones federales en su mayoría. Hace apenas unos días decía “más vales solos que mal acompañados”. Sin embargo, seguramente los cálculos no le salen para lograr el triunfo, aunque según las encuestas -en las que ya nadie cree- él va a la cabeza.
La pretensión del encuentro de morenistas seguramente les servirá para establecer el número de comités de base con los que cuenta esa fuerza política en el país, la que gracias al debilitamiento del PRD, ha crecido, en tanto que la rémora del PRD pretende seguir fortaleciendo a la derecha con sus inentendibles alianzas en las que siempre pierde frente al PAN.
Según el líder de Morena, López Obrador, hasta este mes de diciembre del 2016, han conformado cerca de 50 mil comités a lo largo y ancho de todo el país, por lo que aún les falta constituir alrededor de 18 mil más, uno por cada sección electoral en la que se encuentra dividido el país de sus 300 distritos.
Amlo dice y con razón numérica y política, que la anticipación para contar con un ejército electoral territorial de más de medio millón de personas a más de un año de distancia de los comicios presidenciales “tiene justificación” ya que si Morena piensa buscar un mes antes de los comicios del 2018 a sus representantes de casilla “van a estar fritos” frente a la forma de actuar de los adversarios que irán con todo por la compra del voto en las regiones más pobres del país. El discurso de siempre, como para –una vez más- justificar anticipadamente su derrota Andrés López Obrador, electoral. Aunque él diga que a la “tercera será la vencida”. Sin embargo su discurso derrotista evoluciona una vez más.
Dijo que “desde abajo enfrentarán la andanada de compra del voto, de fraude, e insistió al decir, si estamos un mes antes de la elección presidencial buscando representantes de casilla, ya estamos fritos, no, eso lo debemos de resolver con mucha anticipación, nos estamos jugando el destino del país, el destino de México, el futuro de las nuevas generaciones”. Otra vez alusión al fraude y a su tercera derrota.
Amlo, el único candidato en campaña –bueno también Ricardo Anaya, aunque este no sabe si será candidato del PAN- ya adelanta oficialmente compra de votos, fraudes y su tercera derrota electoral para la Presidencia de la República. Se parece a los “cueteros”, a sabiendas de los riesgos que corre, se la vuelve a jugar y ya adelanta su tercer fracaso. Total, como es su “modus vivendi”, seguramente ya se acostumbró a las derrotas, por eso lo anuncia con toda anticipación.