El operativo de alcoholimetría que se realiza en las distintas vialidades de la capital queretana ha arrojado resultados alentadores al registrar una disminución significativa en comparación con el año anterior sobre auromovilisttas infractores que rebasan los límites permitidos de alcohol.
Durante el cierre del año 2022, se contabilizaron un total de 1,982 casos positivos en las pruebas de alcoholimetría. Sin embargo, a solo una semana de finalizar el 2023, el número ha descendido a 1,658 positivos, marcando así un decrecimiento del 16.34%. Estos datos fueron proporcionados por Martín Arango, Secretario de Gobierno del Municipio de Querétaro, quien destacó la importancia de la concientización ciudadana.
“La reducción en los porcentajes es evidente, reflejando un 16.34% menos de casos en comparación con el 2022. Esto indica que, a pesar de mantener el mismo nivel de pruebas y operativos, la sociedad está demostrando mayor conciencia en el consumo responsable de alcohol”, afirmó Arango.
Es relevante señalar que, según el historial mencionado, el 42% de las personas remitidas poseen educación universitaria, mientras que el 30% cuenta con educación media superior. Estas infracciones conllevan costos que ascienden a $1,902,396, además de los gastos asociados al procedimiento de arrastre y corralón.
Durante el último fin de semana, se llevaron a cabo 400 pruebas de alcoholimetría, de las cuales 34 resultaron positivas. De estas, 28 individuos fueron conducidos al “Torito” debido al grado de alcohol detectado, y 23 vehículos fueron remitidos al corralón.
