Luego de que se aprobara unanimidad por parte de ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación la despenalización del aborto, las reacciones por parte de algunas organizaciones defensores de la vida no se hicieron esperar tal fue el caso de PorQuerétaroTodo quién calificó dicho veredicto como una vergüenza nacional.
A través de un comunicado de prensa dicha organización consideró que no se puede considerar como un logro social una decisión que atenta contra la vida humana
“Es tanto como decir que un parricida es un héroe familiar al privar de la vida a su padre o que debe permitirse privar de la vida a una mujer por causas homofóbicas”.
En dicho documento mandado a distintos medios de comunicación se establece:
El aborto como delito ha estado clasificado y contenido en los Códigos Penales del país en el Título de los DELITOS CONTRA LA VIDA.
Debemos entender que al momento de la concepción (el ingreso del espermatozoide al óvulo se da la fecundación) YA EXISTE UN SER HUMANO QUE TIENE EL DERECHO A LA VIDA, así como cualquier otro ser humano con vida.
Por supuesto que es grave y lamentable la condición de cualquier mujer que queda embarazada después de tener una relación sexual de la que no esperaba concebir.
A ello se suman condiciones de pobreza, de ignorancia, de señalamiento social, de discriminación y para colmo, del cobarde abandono del padre que tampoco quería engendrar.
Por supuesto que no se debe criminalizar a nadie; en eso coincido con lo hecho por la Suprema Corte, pero el fondo del tema no es ese: se trata de entender la vida como un derecho fundamental de todo ser humano desde su concepción y de castigar a quienes no respeten la vida.
Es gravísimo querer engañarnos y afirmar que el derecho a la libertad de la mujer para abortar es superior el derecho a la vida de su hijo, quien no puede defenderse sino con la rectificación de la conciencia de la madre cuando decide abortar.
No perdamos de vista que un embarazo es causa de dos, de un hombre y de una mujer y que la afirmación de señalar a la mujer como dueña de su cuerpo para decidir abortar o no, es una falacia que tiene una visión incompleta de la realidad pues una mujer no puede quedar embarazada sin la presencia de un hombre y entonces el hombre también debería tener derecho a decidir sobre el futuro del bebé en riesgo de ser abortado.
Una sociedad que permite la cultura de la muerte es una sociedad destinada al fracaso social pues no solo se trata de permitir el aborto, lo que sigue es la promoción de la permisividad de forma exacerbada que nos llevará a incrementar el mal uso de la libertad en perjuicio sobre todo de los niños y jóvenes: aumento de adicciones, de deserción escolar, de hijos sin familias estables, etc.
Qué le dirás a tu hijo cuando te diga que embarazó sin querer a su novia?
Que aborte? o que asuma su responsabilidad como hombre y padre del bebé que concibió.
O qué le dirás a tu hija cuando te diga que está embarazada y que no sabe qué hacer porque no quería quedar embarazada?
Que aborte? o que asuma su responsabilidad como madre?
Sabemos cómo sociedad lo que estamos permitiendo?
Medimos el alcance de nuestra indiferencia social y sus efectos?
Lo que hoy debería de promover el Gobierno es la educación responsable de la sexualidad que es en realidad el origen del problema pues el bebé que ha sido concebido de forma irresponsable por sus padres no es culpable de ello y SI tiene derecho a nacer.