“Frecuencias”.
Así como en la coalición libre del PRI, PVEM, PANAL, y el Partido del Trabajo (PT) se aprecian y son objetos de mofas ciudadanas las pésimas y vigentes imágenes cotidianas, donde el Partido Nueva Alianza (PANAL), partido político fundado por la ex líder magisterial del SNTE y aún encarcelada Elba Esther Gordillo. También ha sido muy notoria la serie de cuantiosas multas que el INE le ha endilgado al Partido Verde Ecologista Mexicano (PVEM), derivado de los actos anticipados de campaña, en los que a nivel nacional ha incurrido.
Así, también se ubica –en contrapartida- y con cierta suspicacia la actual coalición convenida en territorio queretano, entre el PAN y la organización política Movimiento Ciudadano (MC), cuya dirigencia estatal en Querétaro es cuasi familiar, similar al del PVEM, con los González Torres; éstos a escala nacional.
El candidato de MC, al cargo de gobernador, me comentó en días recientes que esta alianza para las elecciones intermedias le sumaría unos 40 mil votos al PAN. ¿No que no existe el voto corporativo? Ese mismo dato me lo confirmó José Luis Aguilera Ortiz, Coordinador operativo estatal de esa organización política.
En cuanto al origen del Verde Ecologista Mexicano, su fundador, José González Torres (ex priista y yerno del ex gobernador tamaulipeco, Emilio Martínez Manatou) proviene de una familia millonaria (en dólares), uno de sus hermanos es el empresario farmacéutico dedicado a la distribución de medicinas similares (“Farmacias Similares”); conocido como el “Doctor Simi”.
El heredero del Verde Ecologista es el famoso junior y “Playboy”, cuyo mote es el “Niño Verde”. Los político-empresarios que administran la “franquicia” del PVEM cuentan con sórdidos antecedentes de corrupción, además de que al actual Senador ecologista le imputaron probable participación de acciones criminales, uno de los hechos sucedió en uno de sus propiedades en una zona muy exclusiva y costosa de Cancún, Quintana Roo, cuando en una parranda “cayó” una joven extranjera de la terraza que se encuentra a más de 15 pisos de altura; ese caso se esfumó, la “muertita” no dejó rastro alguno. ¡Así se las gastan algunos “políticos encumbrados”!, la justicia mexicana no les amedrenta, ésta es sólo para los jodidos, la mayoría de la gente.
Desafortunadamente El ahora Senador de la República, Emilio González Martínez no pisó la cárcel, ni mucho menos fue “fichado”; únicamente ingresó por unas cuantas horas a un Centro de Detención “El Torito”, por conducir en estado de embriaguez, pagó la fianza y regresó días después a cumplir con las 36 horas de pena corporal.
Pero en el MC queretano también hay un “Niño Naranja”, José Luis Aguilera Rico, que lo mismo ha sido diputado federal, local, Regidor capitalino y ahora se encuentra en campaña para regresar a una diputación local. ¿No tienen en Movimiento Ciudadano a más personas que realmente cuenten con trayectoria partidista y que tengan verdadero arraigo en las comunidades que dicen representar? Sólo resta que incorporen también a un cargo de elección popular a otro de los hijos de José Luis Aguilera Ortiz, cuyo mote es el de “Bambam”.
Se sabe que los operadores políticos “jalan apoyos y probablemente votos”; desafortunadamente las bases doctrinales de los partidos políticos pasan a segundo o tercer plano.
Ni qué decir, con la incorporación de algunos cuantos (recientemente panistas, hasta hace unas horas), se incorporaron a las filas del PRI, para apoyar en la campaña electoral de Roberto Loyola Vera, como Jorge Lomelí Noriega, Jorge Patrón, Raúl Orihuela González y de Hipólito Pérez (a éste sólo en su casa le conocerán).
En verdad, salvo Raúl Orihuela González, que si llegara a ser elegido como ganador del PVEM a la presidencia municipal de Tequisquiapan, -ya lo fue por parte del PAN y no salió bien librado, quedó muy raspado; los restantes individuos difícilmente encontrarán “chambas” de buen nivel, en caso de que Roberto Loyola Vera llegue a la gubernatura del estado. Jorge Lomelí Noriega (antiguo priista, se pasó al PAN y ahora “chapulineó de nuevo a su anterior Partido político, el mismo que le diera cobija hace tiempo; Lomelí Noriega vuelve al redil.
¿Qué la política mexicana es el “arte” del saltimbanqui, del “chapulineo”?
Se sabe que en el pasado mes de enero Lomelí Noriega invitó a muchos panistas de El Marqués y sin advertirles de la asistencia de Loyola Vera, cuando éste llegó a su domicilio particular, ubicado en el selecto sitio residencial denominado “El Campanario”; menuda sorpresa de los que acudieron a la “cita panista”; desde ese entonces, Jorge Lomelí Noriega ya había enseñado las uñas; su coraje e indefensión por no haber sido postulado y “palomeado” para volver a ser –por segunda vez- candidato de Acción Nacional a la presidencia municipal de El Marqués, se le escurrió de entre los dedos, ya estaba muy herido políticamente. La primera ocasión en que fue “ungido” data del 2009, fecha en que perdió frente al priista Rubén Galicia.
En fin, la mayoría de esos ex panistas, que han probada su éxodo al partido tricolor no le ofrecerán significativos votos a Roberto Loyola Vera en el PAN eran considerados como mediocres; sin gran arraigo entre sus comunidades. A lo mucho podrían recibir ciertos restos de panecillos, o “mendrugos de pan”.
Como apoyo de lo anterior, les recomiendo la lectura de mi reciente Columna “Frecuencias”, intitulada: “Rómpete una pierna”, en ella destaco a uno de esos “distinguidos panistas”, que se fueron como se dice en el lenguaje popular, “como las chachas”; con el debido y honroso respeto de las colaboradoras domésticas.
Correo electrónico: jroldanacosta@hotmail.com Twitter: @Jroldana
