TRAS LA VERDAD
El Presidente de la Comisión y Presupuesto de la LVIII Legislatura local, Eric Salas González, adelantó que habrá un incremento más en el impuesto predial, para el año 2017, el cual lo sustentan en los movimientos al alza de las tablas de valores.
Dijo que esperar no rebase el 6%, lo que significaría no más allá de 50 pesos. Algo semejante se argumentó el año anterior y no fue cierto, hubo casos en que el incremento al predial fue hasta del 100% y todo por que mueven las tablas de valores los sedicentes peritos valuadores de manera discrecional.
Las tablas de valores son instrumentos arbitrarios que se utilizan desde hace años para fijar precios al metros cuadrado de la tierra y a la construcción que se erija en los predios. De tal manera que, de un día para otro dicen que su inmueble vale más, entonces debe pagar más impuesto. Eso es uno de los instrumentos que han hecho que nuestro Estado sea uno de los más caros para vivir.
Los únicos que absorben el impuesto son los propietarios de casas habitación o propietarios de terrenos baldíos; el resto de los inmuebles dedicados al comercio simplemente trasladan el impuesto al consumidor y los dueños no pierden. Así que el arrendador del bien también le incrementa el precio al producto que comercie y así sucesivamente la cadena de inflación crece.
Si a estos incrementos se aumenta la inflación generalizada, entonces concluimos que todo sube y los salarios tradicionalmente se rezagan. Para muchos de los burócratas la situación fue aun mucho más grave. En el sexenio y trienio pasados, las autoridades encontraron la torcida y amañada idea de no incrementar el salario a los empleados de confianza, así como a muchos de los jubilados. De tal suerte que el personal activo no podía inconformarse por el arbitrario abuso que cometieron, so pena de ser despedidos, no podían demandar.
Y los salarios se rezagaron ante la carrera inflacionaria, dado que el porcentaje no incrementado en un año, perjudica en lo sucesivo y se vuelve una cadena de injusticia anual. Algunos jubilados han pensado en demandar el pago de los retroactivos que les perjudicará por siempre hasta su muerte, lo que constituye un abuso y violación al derecho salarial, al igual que a los decretos jubilatorios que obligan a la jubilación dinámica y no la llevaron a la práctica. Esta es otra forma de corrupción que pasa inadvertida dado que solo perjudica a unos cuantos; corrupción e injusticia a fin de cuentas. Y a las autoridades responsables poco les importó ¿Dónde quedó ese dinero que era destinado a salarios y jubilados? Nadie lo sabe.
Así las cosas, el gobernador Francisco Domínguez, mucho más consciente de la situación, dijo el mes pasado que descartaba hubiera incremento de impuestos, así como creación de nuevos tributos, no había que “cargarle la mano” a los ciudadanos. Tampoco aumentará la tarifa del agua. Esto por lo que ve al ámbito estatal ¿Entonces por qué Eric Salas González, adelanta incremento al impuesto predial? Seguramente dirá, es facultad municipal.
El gobierno federal adelantó un recorte presupuestal de 239.7 mil millones de pesos, que impactarán en el gasto federal en varios rubros, arrastrando a los estados. La crisis económica lo amerita para evitar mayores conflictos a la economía mexicana, entre otros la enorme deuda que arrastran los gobiernos. Y todos piden mayores incrementos a sus presupuestos.
También adelantó Eric Salas que el presupuesto del IEEQ aumentará hasta 200 millones de pesos. Por supuesto que para la mayoría de los queretanos en nada interesa lo que haga el IEEQ fuera de proceso electoral, por eso el gasto de esos 200 millones de pesos bien valdría la pena destinarlos en acciones sociales. Pero no quieren sacrificar “la democracia”, de ahí viven los partidos políticos.
Lo advertido por el diputado Eric Salas, es eso, una advertencia para todos los contribuyentes. El pretexto ya está dado, el ajuste a las tablas de valores que provocan un incremento generalizado en otros rubros de la economía. Y la cascada de pagos se cristalizará como cada año, aunque no sea lo mismo con los salarios, al menos en la proporción. Mencionar los derechos e impuestos a pagar no tiene caso. Sin embargo, hay que cumplir como buen contribuyente; de la recaudación sale para cubrir infinidad de necesidades sociales, seguridad pública, salud, educación, etcétera.
Por ello es fundamental cuidar el gasto, “amarrar” el aguinaldo y prima vacacional para no dilapidarlo, sobre todo con la “venta de espejitos” en el “Buen Fin”, regalos navideños innecesarios muchos de ellos, fiestas y “francachelas”. Ahorrar en la medida de lo posible y realizar solo gastos necesarios. Es tiempo de hacer cuentas responsables de lo que hará con el dinero “extra” que recibirá para cubrir las necesidades, obligaciones, imprevistos y gustos; sobre todo, no olvide ahorrar.
