En los últimos días, el municipio de Querétaro ha vivido una serie de tensiones entre comerciantes artesanos y las autoridades municipales. Martín Arango, Secretario de Gobierno del municipio, informó que se han presentado siete denuncias contra comerciantes artesanos por los delitos de lesiones contra inspectores y daños a un vehículo oficial.
Según Arango, “fueron seis denuncias por cada inspector agredido, más una por los daños a la camioneta del municipio, que resultó golpeada y rayada con palos”.
Los incidentes comenzaron con el aseguramiento de mercancía de artesanos que intentaban vender sus productos en la vía pública sin los permisos correspondientes.
El pasado sábado, se realizó el primer decomiso a una artesana que vendía fuera del templo de San Francisco.
“Fue un aseguramiento en estricto apego a la reglamentación municipal. Se le solicitó verbalmente que se retirara y, al no acatar, se procedió al decomiso”, explicó Arango.
Esto provocó la manifestación de aproximadamente 15 artesanos frente al Palacio de Gobierno en Plaza de Armas, exhibiendo sus productos pese a la prohibición.
El domingo, los artesanos volvieron a exponer sus productos, lo que llevó a un operativo de retiro alrededor del mediodía. Arango mencionó que “se les indicó que había un espacio destinado para la venta de sus productos en el mercado artesanal, pero la reacción de los artesanos fue violenta”.
El resultado fueron seis inspectores agredidos y una camioneta municipal dañada.
El Secretario de Gobierno subrayó que la mayoría de los comerciantes artesanos venden sus productos en el mercado artesanal, y que muchos de los manifestantes no forman parte del proyecto municipal. “Son personas que vienen de Amealco, pero no los identificamos como vendedores del mercado artesanal”, señaló.
Ante la pregunta de un posible trasfondo político, Arango comentó: “Podríamos interpretarlo de esa manera, ya que no son artesanos que vendan regularmente en el primer cuadro. Desconozco si hay un interés político detrás, pero estamos abiertos a recibir pruebas si hay evidencias de lo contrario”.
Arango concluyó diciendo que no hubo agresiones por parte de los inspectores municipales y que se están buscando acuerdos para devolver la mercancía decomisada. Además, recalcó que la ausencia de elementos policiacos fue para evitar enfrentamientos y reducir la tensión.
