El peso mexicano registró este domingo una depreciación del 0.42%, cotizando en un promedio de $20.32 pesos por dólar, lo que marca una tendencia de pérdida de valor frente a la moneda estadounidense a pocos días de finalizar el año 2024.
El tipo de cambio FIX, referencia oficial utilizada para obligaciones en dólares, cerró en $20.16 pesos, reflejando una caída frente a la estabilidad observada durante gran parte de diciembre. Este comportamiento responde a una combinación de factores económicos y políticos que están incrementando la volatilidad en los mercados financieros.
Entre los elementos que influyen en dicha depreciación resaltan:
Política monetaria restrictiva en EE.UU.: La Reserva Federal ha anunciado la posibilidad de mantener un ciclo restrictivo durante 2025, lo que fortalece al dólar.
Recortes de tasas de interés: Tanto la Reserva Federal como el Banco de México han realizado ajustes a la baja en sus tasas, lo que genera un entorno de incertidumbre en el mercado cambiario.
Datos inflacionarios en México: La reciente publicación de cifras inflacionarias influye en las expectativas de estabilidad económica para el país.
Cambios políticos en EE.UU.: El próximo regreso de Donald Trump a la presidencia en enero de 2025 ha generado incertidumbre sobre la relación comercial y política entre México y Estados Unidos.
Por lo anterior, la depreciación del peso podría impactar en el costo de las importaciones, la deuda denominada en dólares y la inflación interna. A medida que se acerque el inicio del próximo año, los mercados estarán atentos a las decisiones económicas tanto en México como en Estados Unidos, especialmente en materia de política monetaria y fiscal.
El peso mexicano enfrenta el reto de mantener estabilidad en un entorno global caracterizado por la incertidumbre económica y política.
