En el corazón de San Francisquito, una colonia recientemente reconocida como barrio indígena, la calle Dr. Lucio se viste de colores y cultura en honor a las festividades de la Santa Cruz. Desde el 11 hasta el 15 de septiembre, sus habitantes se unen en una celebración que resalta las tradiciones ancestrales y culturales de México.
Los residentes de San Francisquito han creado un ambiente único en la calle Dr. Lucio, situada entre las calles Zaragoza y 21 de Marzo. Aquí, se han instalado puestos con artículos y accesorios que son esenciales para las festividades de la Santa Cruz. Atuendos coloridos, plumas, hueseras, sonajas, huaraches, pulseras e instrumentos prehispánicos llenan los puestos y atraen a visitantes no solo de diferentes estados de México, sino también del extranjero.
Lo que hace que esta celebración sea tan especial es la participación activa de los danzantes y apaches. Estos individuos, en su mayoría, provienen de diversas partes de México y de otras naciones, deseosos de formar parte de esta experiencia única. Los instrumentos prehispánicos que se exhiben en estos puestos son esenciales para las alabanzas y danzas que honran a la Santa Cruz.
Sin embargo, la calle Dr. Lucio no solo es un lugar de comercio y celebración, sino también un punto crucial en la tradición de San Francisquito. En esta calle, se encuentran varios domicilios conocidos como “oratorios”, lugares donde las familias danzantes, siguiendo la tradición, realizan el ritual de la santa velación. Estos oratorios son espacios sagrados donde se conservan y transmiten las creencias y valores ancestrales.
El reconocimiento de San Francisquito como un barrio indígena ha reafirmado la importancia de preservar y promover estas tradiciones.
Esta celebración no solo es una muestra vibrante de las tradiciones culturales, sino también una oportunidad para San Francisquito y sus visitantes se unan en una celebración que trasciende fronteras y conecta con las raíces profundas de la historia mexicana. La Santa Cruz es más que una festividad; es un recordatorio de la riqueza cultural que enriquece a esta nación.
