A partir de hoy 1o de octubre entra en vigor la reforma al Reglamento Municipal de Protección Ambiental y Cambio Climático, con el cual se prohíbe la entrega de popotes de plástico que no sean biodegradables en restaurantes, cafeterías y hoteles entre otros establecimientos,
Los popotes están elaborados a base de petróleo, por lo que tardan entre 200 y 500 años en degradarse, y que además, la ONU ha señalado que los océanos contienen 18 mil fragmentos de plástico por kilómetro cuadrado, lo que implica la muerte anual de un millón de aves y 100 mil mamíferos marinos.
En el país el 95 por ciento de los popotes no se recicla, por lo que una parte de ellos llega a los rellenos sanitarios, pero otra proporción permanece en el medio ambiente contaminando los suelos, ríos y mares, afectando a las especies que habitan en esos lugares.
La Coordinadora del Consejo Temático del Medio Ambiente Sustentable en el Municipio, Regina Leticia Laura Nava Uribe, celebró la medida al considerar que es necesario que la ciudadanía cambie de hábitos para evitar más daños al ecosistema y tener una mejor calidad de vida.
La reforma se aprobó por el H. Ayuntamiento el pasado 25 de septiembre de 2018.
El Secretario de Desarrollo Sostenible Municipal, Genaro Montes Díaz, informó que el Municipio cuenta con una brigada de inspectores que harán visitas de verificación a los establecimientos que proporcionan popotes para revisar el cumplimiento de la misma. Primero se harán apercibimientos, en segunda instancia amonestaciones y se podrá llegar a sanciones económicas.
Cabe señalar que los popotes biodegradables y el popote reutilizable si podrán ser entregados y empleados, por lo que los empresarios deberán comprobar su origen mediante una ficha técnica que será emitida por el fabricante con las características del producto.