Martín Lara Becerril, vicario general de la Diócesis en la entidad, exhortó a los queretanos y las queretanas, a reflexionar esta cuaresma y generar cambios en la familia.Al ser cuestionado, respecto a las cifras del INEGI, que señala un registro de mil 516 divorcios en el 2014 en Querétaro, posicionando al estado en el cuarto lugar a nivel nacional, comentó que las cifras representan un reto para la iglesia.
Llamó a las familias para que contribuyan en la reconstrucción del tejido social, que permita el desarrollo pleno de los hijos.
Después de celebrar la eucaristía, en la Catedral, como parte de la cuarta semana de cuaresma, destinada a la familia, insistió en la importancia de que a pesar de los pecados, los fieles regresen “a la casa del padre”.
En la misa, enfatizó que los padres, deben tender lazos abiertos siempre a los hijos, sobre todo en etapas difíciles.
Consideró urgente, generar cercanía, dejando de lado el trabajo y el teléfono celular, fomentar los lazos entre hermanos y que esos lazos, deben permanecer aún después de que sus hijos se hayan casado.