Con la llegada de las posadas, se incrementa más del 60% las ventas para quienes se dedican a la fabricación de piñatas, en Querétaro existen varios establecimientos que tiene más de una decena de años dedicándose a este oficio.
Es complicado imaginar una posada sin la tradicional piñata, están hechas de barro, papel periódico o cartón y cuentan con un colorido especial, las más vendidas son las de los siete picos que representa los siete pecados capitales.
“Para nosotros aumenta la venta en un 60%, sabemos que es la mejor temporada del año por las posadas y muchos vienen por ellas” Lorena R. Fabricante de Piñatas.
Se rellenan con mandarinas, cacahuates, tejocotes, naranjas o dulces, para luego con un palo de madera, romperla y quedarse con lo que pueda recoger.
“Es una bonita tradición que no debe morir, en muchos lugares rompen hasta 5 piñatas, por lo que es bonito aun tener esta costumbre” Martin Juárez, Sondeo.