El Papa Francisco acudió el viernes a la Embajada Rusa para transmitir al embajador de Moscú su preocupación por la invasión rusa en Ucrania. Se cree que es la primera vez que un Papa acude a una embajada para hablar en tiempos de conflicto.
A través de un comunicado el pontífice externó su sentir tras los ataques ocasionados en Ucrania y pidió a los líderes a abstenerse de cualquier desición que pueda causar más sufrimiento a las personas.
“Tengo un gran dolor en el corazón por el empeoramiento de la situación en Ucrania.
Quisiera hacer un llamamiento a quienes tienen responsabilidades políticas para que hagan un serio examen de conciencia ante Dios, que es Dios de la paz y no de la guerra; que es Padre de todos, no solo de algunos; que nos quiere hermanos y no enemigos”
Además invito a todos a hacer del próximo 2 de marzo, miércoles de ceniza, una Jornada de ayuno por la paz.
“Que los creyentes se dediquen intensamente a la oración y al ayuno. ¡Y que la Reina de la paz preserve al mundo de la locura de la guerra!”
Las palabras de un líder religioso siempre han causado efecto en problemas políticos, así como en su momento hicieron falta en otras grandes guerras, pero se espera en esta ocasión, el mensaje de Francisco aboné a la solución del conflicto actual.