El Vocero Organizacional, Rafael López González, señaló que ninguna escuela podrá obligar a los alumnos a volver a clases presenciales, sino que será decisión de cada familia.
Puntualizó que el cambio de semáforo federal no afectará el desarrollo del programa estatal de regreso a clases, el cual será modulado por el Comité Técnico para la Atención de COVID-19.
Puntualizó que un retorno a clases seguro es posible si se aplican cinco pasos del entrenamiento social.
1.- Identificar riesgos, no solo dentro de la escuela, sino desde el trayecto al centro escolar.
2.- Diseñar estrategias y compartirlas con los miembros de la familia, especialmente los más pequeños.
3.- Hacer cambios poniéndose de acuerdo en los pasos a seguir y preparar de antemano materiales como cubreboca, gel sanitizante y empaques seguros para almuerzos.
4.- Ensayar las estrategias y los pasos para la ida, la estancia y el regreso de la escuela.
5.- Mantenerse informados tanto de las instrucciones de la Vocería como de los comunicados oficiales.
El Vocero informó que la Secretaría de Educación Pública diseñó una estrategia que atiende las esferas de actividades fuera de la escuela, como transporte y actividades extraescolares; actividades escolares, como la preparación de protocolos y ordenamientos en cada escuela; el monitoreo, que consistirá en detección y rastreo de casos, actividad que señaló como “clave fundamental para convertir las escuelas en aliadas contra la pandemia”, y finalmente actualización comunitaria, en donde las escuelas tendrán la obligación de difundir actualizaciones sobre el comportamiento del fenómeno.