TRAS LA VERDAD
Por fin el pasado 18 de noviembre, se inició la construcción del carril confinado para el transporte público que tendrá una longitud de 13.2 kilómetros –26.4 kms ida y vuelta-, sobre la Avenida Constituyentes, lo que supone pondrá orden en el transporte público en esa congestionada avenida.
Era urgente y necesaria esa obra pública que conlleva el ordenamiento y mejoramiento del transporte público. En un año más ya no veremos la “carreritas” y congestionamientos de los camiones urbanos en esa avenida, que abarcará propiamente desde la entrada de la carretera Querétaro-Celaya, a la Universidad Cuauhtémoc; en tanto que paralelamente se continuará con la obra de ampliación de la Avenida Constituyentes hasta entroncar con varios fraccionamientos ubicados en el Municipio de El Marqués; se trata pues de una obra pública que impacta en beneficio de tres municipios, Corregidora, Querétaro y El Marqués.
Como no iba a ser necesaria la obra de mejoramiento en la movilidad de los queretanos que vivimos en la zona metropolitana, si en unos cuantos años el parque vehicular se desbordó; cuando en 1980 apenas existía un vehículo particular por cada 27 habitantes; hoy un vehículo por cada 5.
De 1970 a la fecha la población creció 5 veces; hablamos que en la zona metropolitana pasó de 221,478 habitantes a 1,255,185 habitantes en el 2015. Hablamos de un desproporcionado crecimiento poblacional. De manera concomitante el transporte público creció otro tanto, 10.5 más los vehículos particulares y 84 veces el transporte de carga. De ahí el caos que se formó sin que ninguna autoridad pusiera orden, al menos en esta zona tan importante.
Habría que hacer hincapié en que los turnos de trabajo serán diurnos y nocturnos para avanzar lo más pronto posible, no habrá “puentes de descanso”, como lo han hecho en algunas obras; en las intersecciones solo se trabajará en fines de semana para causar las menos molestias; la obra se realizará por tramos, lo que significa que no abrirán sin ton ni son a todo lo largo de los 13.2 kilómetros, para evitar mayores problemas de circulación vehicular. Otra buena noticia, no habrá cierre de vialidades.
Además de los beneficios que se espera tener en el ordenamiento, modernización y eficiencia del transporte, las obras se realizarán, según se ha dicho, causando las menores molestias en la construcción.
La continuidad en la ampliación de la Avenida Constituyentes por fin se hará realidad, dado que en el sexenio pasado se anunció la obra y no hicieron nada; en la venta de los lotes de aquella zona se promocionaba como un atractivo la construcción de esa obra y nada, lo que al paso de los año se ha convertido en un verdadero problema de tránsito, miles de casas habitación se han construido en el Municipio de El Marqués, cuyos habitantes solo tienen una vialidad de entrada y salida, la antigua “Cuesta China”. Los vecinos se quejaron y encontraron inmediata respuesta por parte del gobierno del estado. Obra ofrecida y no cumplida por la administración calzadista, como lo fuera la continuación de la Avenida Rivera del Río, hoy Avenida Universidad.
Trabajos complementarios para el reordenamiento vial. Es deseable que el gobierno del estado, tenga previsto que no se estacionen vehículos a los costados de la transitada Avenida Constituyentes, literalmente invaden permanentemente dos carriles que debieran ser para el tránsito vehicular y no para estacionamiento.
Ello complica aún más los espacios de movilidad. Vamos, máxime cuando se pretende que la nueva obra también contemple los espacios confinados no solo para el transporte público, también para los bicicleteros, quienes no gozan de educación vial y transitan en sentido contrario, sobre las banquetas y se cruzan por donde les place; estos también deben entrar a la modernización del respeto a la señalización vial.
Hasta ahora muy bien en los proyectos que conciernen a la modernización del transporte público, que llegó a ser un verdadero fracaso en el sexenio calzadista, pretensión que, sin embargo, llenó los bolsillos de dinero de algunos abusivos exfuncionarios. Hasta ahora los proyectos se vislumbran como buenos, esperemos que el tiempo nos dé la razón, tanto a las autoridades como a los sufridos queretanos que habitamos en esta zona metropolitana, quienes con el paso del tiempo hemos venido sufriendo el deterioro de nuestra calidad de vida ¡Ya era justo!