TRAS LA VERDAD
Este domingo AMLO reiteró sus acciones populistas, sin las cuales no tendría el apoyo de las clases marginadas, aquellas que además se caracterizan por tener menor conocimiento, escasa o nula educación escolar, incomunicación con el mundo exterior, fácilmente manipulables.
Son el caldo de cultivo electoral del presidente ahora que, por enésima ocasión anunció el “plan de vacunación”: primero las poblaciones más pobres, los de la tercera edad más vulnerables del país. Sus “correcaminos” o “siervos de la nación”, irán al frente, acudirán a 333 municipios, los más alejados ¿alejados de dónde? Exacto, irán en donde no hay mayores problemas de mortandad por el Covid-19, dejando para después a los más vulnerables de las ciudades, ahí también viven los muy pobres. Esa población que no se ha dado de alta en la fallida “plataforma” que creó el gobierno federal para dar suscribir a los adultos mayores. Aquellos que entregarán su credencial de elector para ser vacunados. Por eso López decidió acudir a los lugares más lejanos, en donde sí llega el INE e instalará casillas electorales. Maquiavélico plan electoral de AMLO.
A finales de la semana antepasada, aseguró que llegaría las vacunas la semana anterior, hecho que no sucedió, pero todos los medios de comunicación dieron por hecho que así sería. La mitomanía de siempre. Tuvo que desmentirlo el sabelotodo del Secretario de Relaciones Exteriores ¡Las vacunas llegarán después! Y así sucedió. Pero, Andrés habían lanzado una más de sus ficciones, se difunden como verdades ciertas, a pesar de ser mentiras.
Ahora resulta que la “vacuna mexicana” contra el Covid-19 llevará por nombre “Patria” ¿De dónde sacó tremendo mentís? No hay, por lo pronto, ninguna vacuna mexicana y las que serán “embaladas” en Querétaro, no se producirán en México, el “químico” vendrá de la India y México las distribuirá ya empaquetadas, pero ¿vacuna mexicana? Por lo cual ordenó al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología que lleve ese nombre la vacuna ¿De verdad no estará mal de la cabeza el presidente de la República?
Llegaron 870 mil dosis de vacunas del laboratorio AstraZeneca, adelantando que para el mes de abril habrán terminado de vacunar a los poco más de 15 millones de adultos mayores; habrá 1,081 centros de vacunación, distribuidas en toda la República Mexicana. En casi dos meses no han podido inocular ni a un millón del personal médico, dieron comienzo el 23 de diciembre pasado; luego, parte de las vacunas fueron desviadas para sus “correcaminos”, los nuevos “mapaches electorales” al servicio de López Obrador ¿Y el personal médico del sistema de salud y hospitales privados que no han sido vacunado, para cuándo? Los números ni los tiempos no le cuadran al mitómano de Andrés López Obrador.
Del lunes 15 al 30 de abril, son exactamente 75 días. Si consideramos una población cerrada (son más) de 15 millones como objetivo para vacunar, necesariamente deberán inocular a 200 mil adultos mayores diariamente ¿quién le aseguró a AMLO que tendría los 15 millones, 717 mil, 170 de vacunas? Esa es su populista meta. Claro que nos miente, como suele hacerlo y afirmar que cumplió oportunamente.
Hasta hoy, dada la demanda mundial, más el Colaboración para un acceso equitativo (COVAX), del que forma parte México, por medio de la OMS, han tenido escases de vacunas; esperan que 2 mil millones de vacunas se repartan equitativamente. López comprometió a México, de entre más de 30 países latinoamericanos a no “agandallarse” las vacunas.
Pero, en realidad son 172 países a nivel mundial los adheridos al sistema de “repartición equitativa”. Nuestro país estaría recibiendo por medio de COVAX, 6 millones, 472 mil, 800 dosis y la distribución será para todo el 2021. 10 países latinoamericanos no pagarán la vacuna por falta de recursos económicos, pagarán los demás países, entre ellos el nuestro ¿respetará López el acceso equitativo de las vacunas? Hasta hoy no lo ha hecho. Seguramente continuará con la misma tónica de no cumplir ni lo uno, ni lo otro; y si algo llega a entorpecer y evidenciar sus mentiras, estará culpando a terceros. AMLO y su corruptor populismo no tienen límites, menos en época electoral, refirma su política de la mentira. No será nadie sin su descarado populismo.
