La colaboración interinstitucional y la participación de toda la sociedad han sido dos de los aprendizajes que ha dejado la pandemia de la COVID-19, a un año de que se confirmó el primer caso de COVID-19 en el estado, informó la directora de servicios de salud, Martina Pérez.
Manifestó una de las lecciones es que una pandemia debe ser abordada de manera interinstitucional y multidisciplinaria, para que diversas dependencias participen aplicando diversas acciones, ya que una situación sanitaria como la que se ha vivido afecta no solo la salud física, también emocional, la economía, la seguridad, la movilidad, entre otros temas.
También, refirió que otra enseñanza que ha dejado la pandemia es que es necesaria la participación ciudadana, con lo cual consideró que estos fenómenos sanitarios se combaten desde la población, no en los hospitales.
“El día de mañana se cumple un año de que se hace público la confirmación del primer caso en Querétaro, creo que ha sido un año de grandes enseñanzas, de grandes esfuerzos; una de las reflexiones es que la atención de salud solo se logra con la participación multisectorial, multidisciplinaria y la otra es la necesidad de la participación de la sociedad. El control de las pandemias no se hace en los hospitales, ni en los centros de salud, se hace con la sociedad”.
Al corte del 9 de marzo, se informa que se acumulan 57 mil 330 casos de COVID-19 y 3 mil 860 defunciones.
De acuerdo al gobierno del estado, el fenómeno está estacionado, con 52 por ciento de ocupación promedio en los hospitales que atienden pacientes COVID-19; llama a evitar salidas innecesarias y suspender reuniones para tener una Semana Santa en Escenario C.
