En Centro Histórico de Querétaro ha registrado incremento en el número de personas que pernoctan en la vía pública. Esta tendencia, que afecta principalmente a los sectores más vulnerables de la población, ha generado preocupación en la comunidad y las autoridades locales.
Según datos recopilados por organizaciones no gubernamentales y el Departamento de Servicios Sociales de la ciudad, el número de personas sin hogar que duermen en las calles ha aumentado en un 30% en comparación con el mismo período del año pasado. Esta situación es un reflejo de los desafíos económicos y sociales que enfrenta la ciudad, incluyendo la pérdida de empleo.
Las bajas temperaturas y las inclemencias del clima hacen que la vida en la vía pública sea aún más difícil para estas personas, poniendo en riesgo su salud y bienestar. Las organizaciones locales y voluntarios han intensificado sus esfuerzos para brindar asistencia, ofreciendo refugio, alimentos y atención médica a quienes lo necesitan.
Las autoridades municipales están tomando medidas para abordar este problema social creciente, mediante sus albergues y la implementación de programas de reinserción laboral. Sin embargo, la magnitud del desafío requiere una respuesta integral que involucre a la sociedad en su conjunto.