Para aquellos deportistas mexicanos, sobre todo para quienes practican asiduamente otras disciplinas ajenas al fútbol y el boxeo, ya que estas dos son las que acaparan los reflectores de los televidentes de nuestro país, aún y cuando en el caso de la primera no seamos considerados en los primeros lugares a nivel mundial, esa situación es muy complicado y casi no hay apoyo mediante recursos federales, no se digan estatales y municipales, como es el caso del voleybol.
Sabemos bien que nuestros deportistas queretanos infantiles y juveniles, considerados por excelencia los “semilleros” de probables y exitosos campeones, de origen, se ven truncadas sus incipientes aspiraciones y deseos por sobresalir en otras facetas distintas a las dos ya descritas.
Tanto niños como jóvenes que practican voleybol de sala dedican muchas horas entre semana para entrenar, además de que los fines de semana participan en torneos locales, estatales y regionales, a fin de seguir perfeccionándose en este disciplina, sometiéndose a jornadas de calor, frío, lesiones físicas, acompañadas de fuertes dolores y aún con ansias de lograr recuperarse a la brevedad para reincorporarse a entrenar a la brevedad.
También se someten a severas presiones para obtener recursos que les faciliten trasladarse y pagar hospedaje, alimentos, además de cubrir la cuota de inscripción y de arbitrajes respectivos, todo ello con la finalidad de seguir superándose en calidad y eficiencia deportiva.
Desafortunadamente, tanto autoridades como la gente y aún los miembros cercanos a la familia únicamente se fijan en resultados y logros obtenidos, más no toman en consideración todo el proceso que eso conlleva.
En el estado de Querétaro, sobre todo en su capital, donde se concentra la mayor parte de la población, salvo la unidad deportiva de el “Cerrito Colorado” -cuenta con 4 canchas de voleybol cubiertas-, no hay infraestructura para más de dos canchas y son los casos de las instalaciones conocidas como “El Hoyo” (ubicada por la Plaza de Toros Santa María), de “Truchuelo”, por Lomas de Casa Blanca, en el “Parque Querétaro 2000”, con 4 canchas a la intemperie. En ésta última también hay 2 canchas de voleybol de playa.
A nivel estatal los equipos formales se encuentran registrados ante la Asociación Estatal de Voleybol de Querétaro (AEQVB), misma que encabeza de manera óptima y es presidida por Napoleón García (presidente) y se apoya en su dinámico vicepresidente, Manuel Martínez.
Se necesita trabajar en lograr mayor fogueo en competencias regionales e inter-estatales, a fin de que existan más y mejores equipos con mayor nivel de calidad, difundir y promover en todos los municipios la capacitación de entrenadores y certificación constante de éstos y se preparen mejor en cuanto a las habilidades, destrezas, para que adquieran novedosas y actuales tácticas y estrategias de juegos, que hagan de éstos más competitivos.
Mucho tendrán que llevar a cabo de manera coordinada y con permanente cercanía, tanto el Indereq, la propia AEQVB, e institutos municipales del deporte de Querétaro, de la mano con los diferentes clubes de voleybol, de los entrenadores y trabajar en serio y formalmente haciendo labor de equipo compacto.
Lo anterior se fortalecería si se contarán con apoyos mediante recursos provenientes de sectores representativos de la iniciativa privada, ello abonaría a que se planeen y realicen mayores fogueos y se consigan mejores niveles de calidad deportiva del voleybol, que facilite mayor proyección regional y nacional.
En cambio, los deportistas, no importando su categoría (por edades y nivel de calidad) dejan de realizar actividades que la mayoría de la gente común lleva a cabo por el sólo hecho de hacer de su práctica favorita una mejor manera de ser eficiente y mejores personas, estudiantes y ejemplares ciudadanos que habitan en Querétaro.
A éstos, tanto las autoridades deportivas del estado de Querétaro como de parte de las empresas locales y de las mismas fundaciones, cámaras de industriales y de empresas, deberían voltear a ver a ese nicho de sano y próspero mercado: la infancia y juventud debe ser apoyada seriamente.
Ejemplo concreto lo observamos quienes tuvimos oportunidad de asistir por espacio de una semana (22-28 de julio pasado) al “Festival Nacional Infantil y Juvenil “, efectuado en la Ciudad de Aguascalientes, el cual fue avalado por la Federación Mexicana de Voleybol (FMV) y se contó con apoyo en cuanto a difusión departe del gobierno de ese estado. En dicho “Festival”, el mejor equipo varonil representante de Querétaro fue “Invencibles”, de San Juan del Río, de la categoría de “Cadetes” y llegó a cuartos de final en la Categoría “A”; por su parte, el equipo femenil de la categoría infantil mayor, denominado “Cedevol” pudo pasar a los dieciseisavos de final en la Categoría “B”, su entrenador es Abraham Rico.
Cabe mencionar que pude percatarme que el gobierno estatal de Aguascalientes sí apoya en gran medida la práctica deportiva en todos los niveles y disciplinas, cuentan con muchas más y bien cuidadas instalaciones de voleybol, basketbol, beisbol, natación, fútbol, entre otros más.
Sería bueno que tanto el gobernador Francisco Domínguez Servién junto con Markus López Winkler vayan a realizar una serie de recorridos a esa Ciudad de Aguascalientes y vean la calidad de instalaciones deportivas con las que ahí cuentan para beneficio de la población hidrocálida. Sólo en una de éstas se dio cabida a 20 competencias simultáneas, albergando a 40 equipos al mismo tiempo.
Adicionalmente, habían otras dos grandes instalaciones, como el “Gimnasio Olímpico”, con cuatro canchas, en el “Gimnasio IV Bicentenario” (4 canchas), donde se realizaron juegos; en total asistieron poco más de 530 equipos provenientes de toda la República Mexicana.
La representación de Querétaro fue la menos concurrida con sólo 6 equipos; las restantes entidades en promedio enviaron entre 25 y 40 equipos de diferentes categorías.
Muchas son los estados que otorgaron apoyos económicos y en especie a sus representativos, como fueron de Guanajuato, Sonora, Chihuahua, Jalisco; a sus seleccionados les otorgaron como mínimo un par de juegos de uniformes (camisetas, licras, calcetas), además de que les facilitaron transporte (incluyendo operador, pagos para gasolina y casetas de peaje.
Los hospedajes, alimentos, casetas de peajes, gasolina, además del pago de inscripciones y de arbitrajes le correspondió a los padres de los participantes.
Nuestros deportistas queretanos se esfuerzan y trabajan arduamente en sus diferentes áreas, no cuentan -salvo una excepción – con apoyos directos del gobierno estatal, sólo cuando se trate de la participación de representativos en la “Olimpiada Nacional” (celebrada anualmente por el mes de Mayo). En dicha competición el gobierno estatal suministra alimentos, hospedajes, traslados y uniformes a jugadores y entrenadores.
Ésta última muy probablemente se verá empeorada por la posible reducción en el presupuesto deportivo a nivel federal ya que podrían desaparecer la denominada “Olimpiada Nacional” y el “Campeonato Nacional Juvenil”, ambos eventos son considerados los más importantes del país, eso reducirían las facilidades para continuar preparándose de manera óptima y en consecuencia, superar las diversas marcas que propicien salir a giras nacionales, no se diga al extranjero.
Menciono lo anterior por el paupérrimo gasto estatal que en el ámbito deportivo se ha ejercido por parte del actual gobierno de Francisco Domínguez Servién, a través de la pésima dirección general del Indereq (Instituto Estatal del Deporte y Recreación del Estado de Querétaro), bajo la batuta de Markus Javier López Winkler, que como futbolista en los “Gallos Blancos” de Querétaro, del Necaxa, Puebla y América y que a su paso por esos equipos mexicanos de primera división dejó mucho que desear, destacándose por su mediocridad futbolística, como defensa y centro-campista.
Muy probablemente esa falta de garra y prestancia durante sus años de futbolista los esté replicando como director del Indereq, ya que no ha sabido coordinar esfuerzos y apoyos para con los institutos municipales del deporte del estado de Querétaro.
Ejemplos hay muchos, López Winkler no ha mostrado interés por remozar o mandar construir nuevas y más instalaciones deportivas en cada uno de los 18 municipios en la que nuestros niños jóvenes se den a la práctica del deporte que en esta ocasión nos atañe; no se diga en la capital del estado; son pocas para el fomento deportivo, carecen también de logística, entrenadores, equipamientos específicos, baños.
Markus López Winkler, por su manera de conducirse como funcionario público, carece de visión de vanguardia, ya que no ha conseguido patrocinios de empresas, fundaciones y de cámaras de industriales y empresas que auspicien y fomenten el deporte estudiantil, futuro semillero de generaciones de excelentes deportistas queretanos.
En Querétaro, las autoridades deportivas únicamente se enfocan en los deportistas de alto rendimiento de especialidades individuales en particulares casos del karate-do, judo, atletismo, etcétera. Sobre las de conjunto, como el voleybol; además de que en la capital no sobrepasan las 20 canchas para la práctica del voleybol, casi todas a la intemperie; eso no ayuda en nada a que se incentiven a muchos más niños y jóvenes se interesen en esta importante competición en la que confluye el trabajo en equipo, básico en las condiciones actuales.