Durante el periodo de confinamiento, la secretaria de servicios públicos del municipio de Querétaro suspendió la operación de la planta de tratamiento de residuos sólidos ubicada al norte de la capital conformó la titular de la dependencia, Alejandra Haro.
Lo anterior se realizó con la finalidad de evitar que los trabajadores estuvieran en contacto con residuos peligrosos, vinculados a la enfermedad de COVID-19, que desechan los ciudadanos.
Sin embargo, se dialoga con la empresa que opera la planta para que en próximos días se ponga nuevamente en operación.
Manifestó que, del 17 de junio a la fecha, cuando Querétaro fue ubicado en el semáforo epidemiológico de COVID-19 se recolectaron en promedio diario 785 toneladas de residuos domiciliarios, esto es una disminución del 5 por ciento con respecto a lo que se recolectaba durante el confinamiento; mientras que a través de las papeleras se recolectaron 10 toneladas, esto es un aumento del 20 por ciento, en comparación a lo que se recolectaba durante el confinamiento.
Actualmente, ambos servicios se mantienen trabajando de manera regular y sin que hasta ahora alguien del personal haya sido reportado como positivo de COVID-19.
Los residuos se enviaban directamente al relleno sanitario, desde el 18 de abril cuando se suspendió la operación de la planta.